Permitame contarle una historia, que a lo mejor le es familiar.
Un cierto día una empresa decide crear su propio sitio web para lo que se pone en contacto con un “profesional”. Tras unos meses esta empresa cuelga en Internet su web, que contiene una breve descripción de la empresa y productos, un formulario de contacto y una animación muy espectacular en la portada. Pasados unos meses, durante los cuales no recibe ninguna información de su web, usted decide pedir una nueva versión mejorada de su web. Lo que antes era verde ahora será amarillo, la animación cambia para acabar con un fundido en negro y le añaden una nueva sección llamada noticias donde aparece el dibujo de un obrero junto al texto: “en construcción”.
Fin de la historia.
